
Con 102 años y una energía que desafía el calendario, Charlotte Chopin sigue dando clases de yoga en el pequeño pueblo de Léré, en el Valle del Loira, Francia. Poco antes de cada clase, se arremanga, se ajusta el pantalón y, con paso tranquilo, invita a sus alumnas a tomar posición.El secreto tras sus movimientos seguros y la serenidad que transmite no está en recetas milagrosas: reside en una vida hecha de pequeños hábitos, vínculos constantes y pasión por el presente.n. El secreto tras sus movimientos seguros y la serenidad que transmite no está en recetas milagrosas: reside en una vida hecha de pequeños hábitos, vínculos constantes y pasión por el El secreto tras sus movimientos seguros y la serenidad que transmite no está en recetas milagrosas: reside en una vida hecha de pequeños hábitos, vínculos constantes y pasión por el presente.