Dentro del caso de femicidio de la subteniente Pamela Ati, la Fiscalía de Género de Orellana está trabajando intensamente para que su muerte no quede impune. Los documentos del proceso revelan el desgarrador sufrimiento de la joven militar de 25 años, quien fue sometida a una brutal violencia sexual y a golpes en todo su cuerpo.
La autopsia preliminar había indicado la presencia de un líquido blanquecino en los genitales de Ati. Mientras que el nuevo informe añade la observación de presunto abuso sexual con fisuras, enrojecimiento e inflamación en el himen.
Según reportó Ecuavisa, que tuvo acceso al parte médico, el cuerpo de la oficial tenía hematomas en el cuerpo, incluidas sus partes íntimas.
Además, la teoría de la Fiscalía sugiere que Ati fue asfixiada para evitar que los autores fueran identificados. La perito determinó que las lesiones revelan “que fue retenida por varias personas para ser violada».
La nueva información ha sido presentada al Tribunal de la Corte de Justicia de Orellana, que el pasado miércoles 17 de julio ordenó la prisión preventiva de los cuatro militares sospechosos.
La Corte Provincial de Orellana aceptó la apelación presentada por la Fiscalía y revocó las medidas alternativas previamente dictadas para los involucrados.
Pamela Ati, oficial del Ejército, fue hallada sin vida el sábado 29 de junio en el Fuerte Militar N.º 19 de Napo, en la provincia de Orellana. Desde entonces, se han revelado varios detalles, incluyendo que un quinto militar la vio en su habitación un día antes de que se reportara su muerte.