Luego de varios días de ausencia pública y en medio de la crisis energética, la noche del 14 de octubre de 2024, el presidente Daniel Noboa reapareció en una cadena nacional para hablar de narcotráfico y advertir a los grupos delictivos que golpearía su financiamiento.
Según el Presidente, imágenes satelitales obtenidas a través de una asistencia internacional muestran que en la zona fronteriza con Colombia existirían unas2.000 hectáreas de cultivos de coca. Esta cifra equivale a la extensión de 1.852 canchas profesionales de fútbol.
Sin embargo, el anuncio no tuvo mayores detalles. Tampoco hubo explicaciones posteriores. El Ministerio del Interior y la Policía Nacional respondieron que los operativos para destruir los sembríos, que, según Noboa ya iniciaron, están a cargo de las Fuerzas Armadas (FF.AA.).
Pero, desde el Ministerio de Defensa se indicó que esta información era de carácter reservada. Mientras que fuentes militares consultadas por PRIMICIAS aseguraron no conocer el origen de la cifra de 2.000 hectáreas de cultivos de coca, pues creen que la extensión real es menor.
Informe privado, no del Gobierno de EE.UU.
En medio de las interrogantes por el sorpresivo anuncio de Noboa, el medio internacional Infobae filtró un documentoque sería la base de las aseveraciones del Presidente de la República.
Se trata del Informe Geoespacial de Cultivos Ilícitos en la Frontera Norte de Ecuador, que -según la publicación- habría sido elaborado por el Departamento de Estado y la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL, por su siglas en inglés) de los Estados Unidos.
Sin embargo, consultada por PRIMICIAS, la Embajada de Estados Unidos en Ecuador indicó que se trata de información proveniente de un estudio privado que fue entregado al Gobierno de Ecuador. Este se basa en datos satelitalesdisponibles públicamente.
Además, la delegación diplomática recalcó que se trata de un análisis exploratorio, cuya finalidad es informativa y no presenta conclusiones definitivas ni recomendaciones específicas.
Asimismo, en el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado, que es financiado por ambas entidades estadounidenses, no conocía sobre este documento.
También, se consultó a la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia (Segcom) acerca de los respaldos de la declaración presidencial y la veracidad del documento. Pero no hubo respuesta.
El análisis exploratorio
El Informe tiene 10 páginas y está redactado completamente en español. Se trata de un «análisis exploratorio» mediando técnicas de análisis geográficos y teledetección de vectores y rásteres (modelos de datos espaciales), que se hizo entre enero y marzo de 2024.
Esta información, además, fue contrastada con imágenes satelitales de la constelación Sentinel-Copernicus, un programa de observación de la Tierra de la Unión Europea.
El Informe reporta que, según el barrido satelital realizado en el primer trimestre de 2024, en Carchi, Esmeraldas y Sucumbíos, provincias ecuatorianas fronterizas con Colombia, se divisó un área de entre dos y 17 hectáreas de cultivos de coca.
Y, con base en este hallazgo y a través de una especie proyección que no se explica, se concluye que en Ecuador habría aproximadamente 2.000 hectáreas de cultivos de coca. Lo que, además, supondría una producción de 61 toneladas de cocaína, al año.
10 años sin monitoreo de cultivos
El Informe Geoespacial de Cultivos Ilícitos aclara que es únicamente un análisis exploratorio y recomienda a Ecuador realizar un Monitoreo de Cultivos Ilícitos de Hoja de Coca. Este es un programa dirigido por la Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc), al que Ecuador pertenece desde 2006.
Sin embargo, el último informe sobre el país se realizó en 2013 y sus resultados se publicaron en 2014. Para esa época, el documento aclaraba que Ecuador no era considerado productor de cultivos ilícitos, sino de tránsito de drogas.
Para ese informe se realizaron vuelos de reconocimiento en 26 puntos de Esmeraldas, Sucumbíos y Morona Santiago.
El resultado fue que Ecuador era un país libre de cultivos ilícitos, aunque se señaló el riesgo de que esto cambie, ya que estaba ubicado entre los dos países que más coca producen en el mundo: Colombia y Perú.
Desde ese año no se volvió a monitorear la presencia de cultivos ilícitos en Ecuador, aunque se lo siguió haciendo en los países vecinos.
En el caso de Colombia, por ejemplo, el último Informe, de 2022, detalla la presencia de 230.000 hectáreas. De las cuales, 147.811 hectáreas estaban ubicadas en las regiones del Pacífico y Putumayo, cercanas a la frontera con Ecuador.
«El 65% del área con coca en el 2022 se localiza en Nariño, Putumayo y Norte de Santander, departamentos que mantienen niveles similares desde el 2012 y que tienen como particularidad ser frontera terrestre (Ecuador, Venezuela y Perú)», se lee en el reporte.