El término demencia se utiliza para describir un grupo de síntomas que afectan la memoria, el pensamiento y las habilidades sociales.
El doctor Norberto Raschella, jefe de Neurología del Hospital Austral, describió en una nota reciente a Infobae: “La demencia es el concepto general de las enfermedades que afectan la cognición. El Alzheimer es la demencia más frecuente y suele comenzar con trastornos en la memoria inmediata o reciente”.
Al tratarse de una enfermedad progresiva empeora con el tiempo, lo cual destaca la importancia de un diagnóstico precoz. Si se detecta a tiempo, su avance puede ralentizarse en algunos casos, por lo que la persona puede mantener su función mental durante más tiempo, afirman los expertos.
Sin embargo, la demencia se presenta como algo más que una simple pérdida de memoria. El doctor Baibing Chen, conocido como Dr. Bing en redes sociales, neurólogo, investigador y epidemiólogo dio a conocer cinco pruebas que pueden identificar señales de alerta de demencia en sus etapas iniciales.
Las pruebas exploran aspectos clave del funcionamiento cerebral, como el equilibrio, el olfato y la fluidez verbal.
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Estas pruebas no cuentan como un diagnóstico profesional, sin embargo, pueden dar pistas para consultar con el médico para que las evalúe.
Las cinco pruebas
1. Mantenerse de pie sobre una pierna durante 30 segundos. Según el doctor Bing, “para las personas sin problemas de movilidad, la dificultad para permanecer de pie sobre una pierna durante al menos 30 segundos se ha asociado con un mayor riesgo de demencia y accidente cerebrovascular”. Esto refleja posibles déficits en las áreas del cerebro responsables del equilibrio y las habilidades motoras.
2. Prueba del sentido del olfato. El neurólogo advirtió que “los problemas con la identificación de olores pueden indicar neurodegeneración, como ocurre en quienes padecen Parkinson o Alzheimer”. La pérdida del olfato podría ser una señal temprana de estos trastornos.
Según un estudio de la Universidad de Chicago, una rápida disminución del sentido del olfato de una persona durante un período de cognición normal predijo múltiples características de la enfermedad de Alzheimer, “incluido un menor volumen de materia gris en las áreas del cerebro relacionadas con el olfato y la memoria, peor cognición y mayor riesgo de demencia”, dijeron los investigadores.
3. Dibujar un reloj con una hora específica. Esta tarea puede revelar problemas con la conciencia espacial, la atención y la planificación, afirmó el médico.
4. Prueba de marcha de doble tarea. Se le pide a una persona con sospecha de demencia que camine mientras realiza una prueba cognitiva “como contar hacia atrás”. “Las dificultades con esto pueden indicar problemas con la función ejecutiva, la memoria o la atención”, explicó el neurólogo.
Un estudio de 2022, publicado en JAMA Network Open comparó los estilos de caminata de las personas mayores con su memoria. Los investigadores encontraron que aquellos que notaron diferencias en su forma de caminar junto con cambios cognitivos, denominados en el estudio como “personas en declive dual”, tenían un mayor riesgo de desarrollar demencia que el resto de los participantes.
5. Prueba de fluidez verbal. Consiste en nombrar la mayor cantidad posible de palabras dentro de una categoría. El experto señaló que “las dificultades para recordar palabras dentro de un período de tiempo determinado pueden indicar un deterioro en ciertas regiones del cerebro, como las afectadas por la enfermedad de Alzheimer o la demencia frontotemporal”.
Estar atentos a los signos de la demencia
Según el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), algunas señales de alerta de demencia son:
- Dificultad creciente con tareas y actividades que requieren concentración y planificación.
- Cambios en la personalidad y el estado de ánimo
- Períodos de confusión mental
- Dificultad para encontrar las palabras adecuadas o no poder comprender conversaciones con tanta facilidad
Ante ellos, lo mejor será consultar al médico. “El profesional preguntará cómo han evolucionado los síntomas a lo largo del tiempo. También puede hacer una prueba de memoria y un examen físico. Es posible que se prescriban análisis de sangre para comprobar si los síntomas están siendo causados por otra afección”, afirmó el NHS.
Si se pueden descartar otras causas, el médico de cabecera puede derivar al paciente a un especialista quien podrá realizar más evaluaciones para confirmar si tiene demencia.
Estar activo, comer mejor, perder peso, no fumar, mantener una presión arterial saludable, controlar el colesterol y reducir el azúcar en la sangre son los siete hábitos saludables que ayudan a reducir el riesgo de demencia, según una investigación publicada en Neurology, la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología.