El Gobierno ecuatoriano prorrogó el contrato de concesión para servicios de telefonía móvil de la operadora mexicana Conecel, que maneja Claro, a cinco días de su culminación y con las negociaciones para su renovación temporalmente suspendidas desde mayo.
En una rueda de prensa realizada en el palacio presidencial de Quito, la ministra de Telecomunicaciones, Vianna Maino, explicó este martes que la prórroga fue suscrita con Claro el lunes mediante notario, y que el Ejecutivo está avanzando una extensión similar para la española Telefónica Movistar, cuya concesión vence en noviembre.
Maino detalló que la prórroga con Claroextenderá las condiciones del actual contrato otorgado en 2008 a la operadora mexicana mientras se retoman las negociaciones para la nueva concesión.
«No contempla elementos distintos a los que ya se tenían en el contrato previo. Las nuevas condiciones, inversiones, coberturas o tecnologías corresponden a la negociación del nuevo contrato», apuntó la titular de la cartera de Telecomunicaciones.
Así, la prórroga se mantendrá vigente «hasta que se firme el nuevo contrato de renegociación, lo cual se estima que deba celebrarse en seis meses«, dijo Maino.
El periodo en el que se mantenga en vigor esta prórroga se descontará del tiempo de concesión del nuevo eventual contrato